La campaña a la reelección del presidente de EE.UU., Joe Biden, señaló este viernes que al expresidente Donald Trump solo le interesa la «venganza» no la «integridad de las elecciones» en referencia a una rueda de prensa que realizará hoy el republicano en Florida sobre el tema.
Se prevé que Trump (2017-2021) y el presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., Mike Johnson, realizarán este viernes un anunció sobre la «integridad electoral» en el club Mar-a-Lago del expresidente en Palm Beach (Florida).
Pese a estar acusado de cuatro caso penales, entre ellos por intentar revertir los resultados electorales en los que ganó Biden y por su papel en el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, Trump es el presumible candidato del Partido Republicano a las elecciones de noviembre.
«A Donald Trump y Mike Johnson no les importa la integridad electoral; sólo les importa ayudar a la campaña de venganza y retribución de Trump a recuperar el poder a toda costa», subrayó en un comunicado de la campaña de Biden el congresista Bennie Thompson.
«El pueblo estadounidense lo sabe y, al igual que hace cuatro años, no se dejará engañar por las peligrosas mentiras de Trump este noviembre», dijo el congresista democrata.
El Partido Republicano presentó el jueves dos quejas sobre supuestas irregularidades ante la Comisión Electoral del estado de Wisconsin, por insuficiencias de inspectores electorales republicanos en los condados de Dane y Milwaukee.
Las querellas señalan que los funcionarios electorales de Wisconsin no contrataron un número suficiente de inspectores electorales republicanos en ambos condados, tal como lo exige la ley.
Por su parte la nota del demócrata Thompson recordó que Trump ha amenazado «que las elecciones de noviembre podrían ser las últimas», como también prometió perdonar a los insurrectos violentos y ha saludado a «los criminales» que atacaron a las autoridades que protegían el Capitolio el 6 de enero de 2021.
La reunión en Mar-a-Lago además se produce en momentos en que Johnson se encuentra bajo presión del ala más radical de los republicanos, encabezados por la congresista Marjorie Taylor Greene, que presentó en marzo pasado una moción para destituirlo.
EL NUEVO DIARIO