Buenos días.
Voy a mantenerme al margen de la situación en el medio oriente. Las cosas no están para verter una opinión fuera de lugar, bien sea de un bando u otro.
Esos dos países vecinos han mantenido esas rencillas por décadas. Se mastican, pero no se tragan.
Esa lucha bélica se veía venir, tarde o temprano, como está por venir, tarde o temprano entre República Dominicana y Haití. Ese pleito está «casao».
Estaremos nosotros viviendo esa época repulsiva que está al doblar de la esquina?. Quizás no, pero nuestros hijos o nietos si probablemente la verán.
Desgraciadamente en las guerras todos son catalogados enemigos entre si y se convierten en perdida colateral.
En otras palabras, pagan justos por pecadores.
Las guerras son nocivas hacia los desarrollos ejecutados por las naciones.
Ojalá haya un entendimiento entre esas dos naciones (lo dudo ya que el daño está hecho), para la paz del mundo.
Seguiremos unidos en oración.