ntre los fuertes llantos de familiares y relacionados, el cuerpo de la niña Willeni Lorenzo Herrera, de 11 años, fue sepultado en un ataúd blanco en el cementerio de Cambita, provincia San Cristóbal, de donde era oriunda.
Willeni recibió el último adiós rodeada de coronas de flores blancas y anaranjadas y la música de la agrupación Tercer Cielo con su canción «Yo te extrañaré».
Los arreglos para el entierro debieron hacerse con gran premura ya que fue en la misma tarde de este sábado cuando el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) confirmó que el cuerpo en avanzado estado de descomposición encontrado en el proyecto Canaán, en la autopista 6 de Noviembre, pertenecía a Lorenzo Herrera, quien había sido reportada como desaparecida desde el pasado 20 de julio.
El cuerpo pudo ser identificado por una foto de la dentadura que sus padres facilitaron a las autoridades de Inacif y por un accesorio que tenía, según confirmó a Diario Libre la madre de la menor, Nicaury Herrera.
La menor residía en La Piña, Madre Vieja Norte, en la provincia San Cristóbal.
Algunos de los presentes al entierro reclamaban justicia y sostenían carteles con la fotografía de Juan Alberto Sánchez, alias «Bruly», acusado de la desaparición de Willeni, quien guarda tres meses de prisión preventiva como medida de coerción, por un caso de violación sexual a otra menor.
Según versiones, Sánchez habría puesto el cuerpo de Willeni dentro de un saco y lo habría tirado por un barranco en el lugar donde fue hallado, una zona donde existen solares baldíos y unos pocos están ocupados por empresas y garajes para camiones.
En declaraciones anteriores, la abuela de Willeni, Dolores Marte, comentó que el día de la desaparición de su nieta encontró una conversación de ellos en su celular.
«Mis otros dos hijos y yo confiábamos en él (Bruly) como si fuera de la familia, nunca pensé que ese delincuente haría algo así», dijo Marte entre lágrimas.
DIARIO LIBRE